El
Midrash Raba dice: ¨Por causa del hisopo que es uno de los árboles
menos apreciados redimió al pueblo de Israel¨.
Lo más valioso que tiene la persona es su simpleza e humildad. Como está
dicho en el ejemplo. Sólo el que está cercano a la tierra se levantará
en la resucitación de los muertos y tendrá el mérito de tener una
vida eterna, como decimos en el rezo shemoná ezre: ¨Cumple su promesa
a los enterrados en la tierra¨. Cuanto más la persona es humilde y
simple tendrá el mérito de
levantarse cuando Di's resucite a los muertos, y tendrá una vida eterna.
Entre más recolectemos puntos de humildad y simpleza, cada día
tendremos más méritos de una vida eterna y el placer del mundo
venidero, como está escrito en el profeta
Isaías 26, 19 ¨Despertad y cantad vosotros que moráis en el
polvo¨. Cada vez que una persona es humillada recolecta puntos de
humildad. El que es humillado o degradado tiene que estar muy contento.
Si sabes que te vas a encontrar con alguien que te va a humillar en la
calle, deberías ir antes a la mikve para tener recipientes para guardar
la luz y el entendimiento que recibirás, que no podrás conseguir de
otra manera. Que con ninguna mitzvá podrás conseguirlo. Ya que la
humillación rebaja a la persona a cero y por medio de esto tiene la
persona el mérito de recibir la luz sagrada. Una luz tan grande. Una
luz infinita. Una luz que proviene sobre todos los mundos y rodea todo
el mundo. Cuanto más recolectemos humillaciones y humildad así
recibiremos más luz eterna. La luz infinita. El rey David dijo en el
libro de Tehilim salmo 51: ¨Límpiame con hisopo, y seré purificado. Lávame,
y quedare más blanco que la nieve. El rey David quiere decir que quiere
ser humillado como el hisopo. Yo quiero ser humillado. Yo quiero que
todos pasen encima de mí. Que todos se rían de mí. Que todos me
humillen. Ya que sólo así se puede hacer una Teshuvá completa. Tengo
que tener bien claro que soy el peor de todos. Soy el que hizo más
pecados y dañé y perturbé más que todos. Por eso yo sólo pido ser
como un hisopo. Yo quiero toda mi vida ser un hisopo.
Hay dos niveles para llegar a la Teshuvá completa. Un nivel es cuando
la persona es humillada y logra callar. Esto es llamado los avergonzados
que no avergüenzan. Escuchan su ofensa y no contestan. Lo degradan y
calla. No contesta. Como está escrito: Va yidom Aharón. Aharón cayó.
Pero hay otro camino que es para los que son alegres con sus
sufrimientos. Estos siempre se están elevando. Lo humillan y lo
degradan pero él está todo el día alegre. Canta y baila y recibe sus
humillaciones con alegría.
Él dice, cada vez que me critican es como si me hubieran curado con
cremas las heridas. Como si fuera una medicina. Todo el cuerpo de él
está lleno de heridas. Desde los pies hasta la cabeza. Y cuando lo
humillan siente como si le hubieran dado una medicina y purificado con
aguas sagradas.
Simpleza y humildad son infinitos no tienen fin. Cuando alguien es
humillado lo convierten en un ser infinito. Lo hicieron un ser sin límites.
Se volvió nada. Ahora que no tiene límites puede sentir la luz del
Creador.
Por otro lado la gente dice que él no sirve para nada, no vale nada que
es un hipócrita. Contra más hablen así de él se convierte más en un
nada. Es anulado entonces le llegan todo tipo de triunfos y prosperidad.
Con una humillación la persona se gana un millón de éxitos. Después
de los insultos y las humillaciones no se acaban los triunfos y la
abundancia. Esa persona se vuelve mantenedor de toda la generación. El
es el que reparte todo lo bueno como está escrito de Yosef: Repartía a
todo el mundo. Como logró Yosef ser el que abastece a todo el mundo. Ya
que sus hermanos lo vendieron y lo humillaron siendo así degradado a
nada y por eso la bendición para todo el mundo pasó por sus manos.
De Yosef aprendemos que cuanto más sea la persona humillada más
bendición y prosperidad tiene. A
veces la persona cuando es humillada se dice a sí mismo me avergüenzan
a mí porque yo sirvo a Hashem. Eso es vanidad. No hay que recibir
vanidad de las humillaciones. La persona tiene que saber que se merece
las humillaciones ya que no es ni Tzadik ni jasid. Él sabe bien que no
estudia la Torá como se debe ni tampoco cuida los ojos. Entonces tiene
que reconocer la verdad. Por eso
si alguien lo reprime tiene que decirse a Si mismo: ¨Bendito sea ese
hombre que me dijo la verdad¨. La persona está obligada a reconocer la
verdad. Entonces si viene alguien y le hace recordar quién es él,
tiene que besarle las manos ya que me dijo la verdad. Como dice la gente:
Odia al que te quiere y ama al que te odia. A tus enemigos tienes que
amar. Ya que cuanto más hablen mal de ti, o te humillen mas crecerás y
a los que te aman hay que odiar ya que sólo te quieren para recibir de
ti un provecho. Sólo
quieren confundirte con sus alabanzas te llenan de fantasías (que eres
un Tzadik que sirves a Hashem con todo su corazón. A esa persona hay
que odiar y alejarla. Pero ese que te demuestra siempre que estás
equivocado a él hay que amar. A él tienes que cargarlo en tus hombros.
Porque tienes tanto miedo de que te digan la verdad. Hasta hoy en día,
que has ganado del respeto y de las alabanzas que te dan tus amigos.
Rabi Najman dice en el libro Likutey Moharán 260: Por medio del
sacrificio total se hacen Yijudim, es unificar el nombre de D´os Y si
los Tzadikim no hacen los yijudim o cuando no hay nadie que se levanta a
media noche a llorar y no hay nadie que sierva al Creador con sacrificio
total, no queda otra alternativa para hacer los yijudim que entregar
almas que son matadas sin culpa. Pero hay otra manera de hacer los
yijudim que es la dicha anteriormente y es cuando la persona recibe las
humillaciones con amor y él es el que salva las almas de esta generación.
Por eso cada vez que la persona recibe una humillación con alegría
debe saber que en ese momento está salvando la vida de muchas personas.
Cuanto más sea importante o conocida la persona y aún así es
humillada y hablan mal de él pero él lo recibe todo con amor entonces
que sepa que ha salvado a más gente de esta generación.
Hay un Tzadik que hace esto intencionalmente. Anda todo el tiempo
buscando todo tipo de formas para
ser humillado e insultado. Causando así que todo el mundo hable mal de
él y por medio de esto hace los yijudim más altos y más grandes.
Porque está persona sacrifica su vida y su alma para el honor de
Todopoderoso. Él está dispuesto que hablan
mal de él incluso que hablen cosas que nunca existieron. Ese
Tzadik salva la sangre de todo el pueblo de Israel ya que por medio que
lo avergüenza derraman su sangre a cada minuto y cada segundo. Y él lo
recibe todo con alegría y amor.
Y así él salva al pueblo de Israel de todos los decretos y desgracias
que supuestamente debía llegar al pueblo de Israel. Por lo tanto cuando
una persona ve que lo están humillando debería recibirlo con amor ya
que está salvando al pueblo de Israel de una desgracia y algo más.
Rabeinu dijo (Siaj sorfei kodesh) El que está en contra de mí no lo
puede odiar, Yo no puedo odiar a alguien que está en contra de mi
camino. ¿Cómo se puede odiar a alguien que me está haciendo un favor?
Yo veo con mis propios ojos lo bueno que me causan, ya que cada vez que
me pasa algo así, se me abre la mente y el corazón y entra luz y
entendimiento a mi cerebro.
Cada vez que una persona es humillada recibe un cheque de un millón de
dólares. Cuentan de Rabi Zusha y del Rabi Elimelej de Luzansk que
cuando llegaron a una hostería había unos borrachos que empezaron a
patearse uno al otro y al ver al Rab Zusha que estaba atrás de Rabi
Elimelej empezaron a golpearlo y a patearlo. Casi le rompieron todos los
huesos. Entonces le dijo Rabi Elimelej a Rab Zusha. Hermano te llevaste
todo sólo. Tú recibiste todos los golpes. Yo también quiero recibir
algunos golpes. Yo también quiero tener parte del Mundo Venidero. ¿Acaso
no me lo merezco? Dame un poco a mí también. Por favor cambiemos de
lugar, yo recibo los golpes y tú te paras atrás y se metió en medio
de las patadas y justo en ese momento los
borrachos decidieron para la pelea con él y otra vez le
empezaron a pegar a Rab Zusha y continuo Rab Zusha diciéndole: Ya ves
todo me lo merezco yo ya que no puede una persona quitarle algo al otro.
Con una humillación son perdonadas las personas de los pecados y de
miles de reencarnaciones. Con una humillación son perdonados miles de
pecados. Con una humillación la persona puede conseguir lo que no puede
conseguir con mil horas de estudio. Cada humillación vale miles de
ayunos. Miles de mortificaciones. En vez de que te metan en el infierno
al fuego te dan en este mundo humillaciones que son un gran Tikún.
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